Amianto y salud

 

“Todas las formas de amianto son peligrosas para la salud y cancerígenas“

Organización Mundial de la Salud (OMS)

 

El amianto es muy peligroso porque es muy cancerígeno, puede provocar cáncer incluso en cantidades muy pequeñas.

Las fibras de amianto son muy pequeñas y la persona no sabe que las está respirando porque no son visibles a simple vista, ni pueden percibirlas.

El daño a la salud ocasionado por el amianto va a depender de:

  La cantidad de fibras de amianto recibida
  La duración de la exposición, total del tiempo que hayamos estado en contacto con estas fibras y su frecuencia
  El tipo de amianto, el amianto azul y el marrón son los más peligrosos
  La forma de exposición: si el contacto ha sido a través de la respiración es más peligroso que si las fibras de amianto han sido ingeridas por la boca
  El diámetro y longitud de las fibras, las fibras de mayor tamaño son más fáciles de eliminar, ya que se depositan en la nariz y en las vías respiratorias superiores. Las más pequeñas pueden llegan a los alveolos pulmonares a través de las vías respiratorias, donde pueden permanecer mucho tiempo provocando desde la irritación hasta la destrucción del tejido pulmonar

 

En algunos casos, la exposición al amianto sumado a otras sustancias, como compuestos químicos peligrosos, el tabaco o algunas rutinas poco saludables, como la vida sedentaria, no practicar ejercicio físico, etc., puede perjudicar en mayor medida el daño a la salud de las personas.

Los principales daños por el amianto se detectan principalmente en la membrana que envuelve los pulmones (la pleura) y en la membrana que recubre al abdomen (el peritoneo).

Las enfermedades que las fibras de amianto pueden producir en el organismo pueden aparecer desde 10 a 40 y hasta 75 años después del inicio de la exposición o primer contacto.

 

¡Atención! Si has estado expuesto al amianto o crees haberlo estado, consulta a tu médico ante los síntomas que presentamos a continuación.

 

Estos síntomas son genéricos y pueden responder a otros daños a la salud, pero es importante que evalúen también el riesgo por amianto:

  Falta de aire, silbidos o ronquera
  Tos persistente que empeora con el tiempo
  Sangre en la flema que sale de los pulmones al toser
  Dolor o tensión en el pecho
  Dificultad para pasar alimentos
  Hinchazón del cuello y cara
  Falta de apetito. Pérdida de peso
  Fatiga o anemia

 

imagen
imagen
imagen

 

Que sepas también que tienes derecho a que el Servicio de Prevención de tu centro te facilite una copia de tu historial clínico laboral (RD 39/97) que deberá incluir datos esenciales de las exposiciones parecidas.

Para más información puedes consultar el Reglamento de los Servicios de Prevención.


DAÑOS PARA LA SALUD

La exposición a fibras de amianto provoca enfermedades muy graves en los humanos. A continuación, las principales enfermedades para las que se que se ha demostrado su relación con el amianto: